Cuando hablas de que te gustaría escribir, muchas veces te sueltan a bocajarro: «¡Escribe un diario!»
También es una de las sugerencias que están proponiendo en emprendeduría, aunque tira más a hacerlo para trabajar objetivos y ver el rendimiento.
¿Por qué es tan recurrido el que comiences a escribir un diario?
Evidentemente, porque resulta más fácil, y esto es así por varios motivos:
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En primer lugar, es algo que solo ves tú. Eso le quita muchísimo temor y proporciona confianza. Sobre todo si empiezas o si eres tímido o reservado.
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Puedes explayarte con tranquilidad: no tienes juicios, críticas, límites de valores, ni que cuidar la expresión ni tus sentimientos. Puedes expresarte con libertad como quieras.
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En tercer lugar, es algo adictivo: a medida que tomes confianza, notarás que cada vez buscas ese momento para encontrarte a solas contigo a través de tu diario.
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Es terapéutico, pues te ayuda a gestionar tus emociones, y no solo a expresarlas. El hecho de escribir sobre un hecho, hace que lo veas desde un punto externo y objetivo. A su vez, tu mente lo percibirá como algo que no le supone un riesgo tratar, pues en ese momento está fuera de ti y de tu subconsciente. Coloca tus emociones en su justo lugar.
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Es productivo, pues te ayuda a preparar, mejorar, desarrollar y evolucionar tu pensamiento y tus futuras acciones, así como prever nuevos retos y mejores objetivos futuros.
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A causa de esto, un diario te aporta serenidad. Es un momento donde puedes relajar todos tus temores y tu tensión.
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Además, es un campo de práctica divertido y que no te compromete, ni en tiempo de dedicación, ni en calidad o esmero. Puedes añadir dibujos, signos, marcas, expresiones… todo lo que se te ocurra sin tener que valorar si es correcto o no.
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Te ayuda a reorganizar tu pensamiento, a planificar, a ver con facilidad prioridades y despejarlas de lo que no es tan importante. Te ayuda a separa lo urgente (que puedes delegar) de lo importante que es lo que realmente tú deseas y amas.
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Y para mi, lo mejor: Es un momento de encuentro contigo mismo. ¿Recuerdas lo que te conté del encuentro con el artista? Esos momentos en que tú, y solo tú, estás en un momento a solas para dejar fluir toda tu esencia, para disfrutar de lo que más te gusta y para reencontrarte con ese dios creativo que llevas dentro.
Así que… ¡Sí!
Escribir un diario tiene razones mucho más poderosas que solo sugerirlo porque resulta más fácil comenzar. Es un verdadero campo de aprendizaje y entrenamiento con el que podrás disfrutar de una parte de la escritura muy interesante: el disfrute de escribir, solo por escribir.
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